El Gobierno de transición de Haití afirmó que la Policía Nacional ha «repelido» un ataque de hombres armados contra el Hospital Bernard Mevs, en el sur de esta capital, y que los agentes han «restablecido el orden», a pesar de que el objetivo de estos es «sembrar el terror y debilitar al país».
«ATAQUE A LA DIGNIDIDAD HUMANA»
La oficina del primer ministro del país caribeño, Alix Didier Fils-Aimé, ha «condenado con la mayor firmeza el incalificable ataque armado perpetrado» contra el hospital» y ha aseverado que «este acto de violencia, dirigido contra un establecimiento vital para la población, constituye un ataque a la dignidad humana, la seguridad nacional y el derecho fundamental a la salud».
«El Hospital Bernard Mevs es un pilar de nuestro sistema de salud, comprometido a abordar las principales causas de mortalidad evitable en el país, incluidos traumatismos, ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares, quemaduras y emergencias maternas. Atacar tal símbolo de vida equivale a atacar los cimientos mismos de nuestra nación», ha denunciado.
El jefe de Gobierno, que ha expresado su solidaridad con el personal del hospital y los pacientes afectados, ha ordenado «garantizar una presencia permanente» de la Policía Nacional dentro del hospital y su perímetro «para prevenir cualquier recurrencia y garantizar la seguridad del personal y de los pacientes».
ASIGNARÁN RECURSOS ADICIONALES
Asimismo, ha indicado que se asignarán «inmediatamente recursos adicionales para que el hospital pueda continuar su misión esencial en las mejores condiciones» y que se está desplegando un plan de seguridad reforzado en torno a las infraestructuras sanitarias críticas en todo el territorio nacional».
«No habrá tregua ni tolerancia para quienes amenazan la seguridad y la vida de nuestros conciudadanos», ha expresado, antes de pedir «unidad y resiliencia del pueblo haitiano frente a estas fuerzas destructivas». «Juntos lograremos restablecer un clima de paz, dignidad y seguridad para todos. (…) Ningún sacrificio será demasiado grande para garantizar la seguridad y la justicia en Haití», ha agregado.
En la víspera, el propio hospital denunció a través de su perfil en la red social X que había sido atacado: «Estamos conmocionados y entristecidos por estos recientes acontecimientos», señaló. La institución destacó que «a lo largo de su existencia» había servido a la población local «sin prejuicios» cuando Haití ha sufrido «terremotos, disturbios, huracanes, COVID y en tiempos de paz».
Haití no tiene presidente desde que a principios de julio de 2021 un grupo de sujetos armados irrumpiera en su residencia oficial y asesinara a Jovenel Moise. Poco después, Ariel Henry ascendió al puesto de primer ministro entre críticas y tras varios años de inestabilidad. En marzo de este año presentó su dimisión tras la oleada de violencia que sacudió la nación.
Desde entonces se ha creado un Consejo Presidencial de Transición con el objetivo de llevar a cabo la tarea de pacificación y crear un Consejo Electoral Provisional para organizar las primeras elecciones en una década. El país cuenta con la presencia de un contingente policial internacional encabezado por Kenia que ha resultado, hasta la fecha, ineficaz para frenar la actividad de las pandillas.